TERMITAS

Dentro del termitero se produce una jerarquización de los individuos que da lugar a una división de los trabajos:

– El Rey y la Reina: Son individuos sexuados, cuya función principal es la reproducción. Todo el termitero gira en torno a la pareja Real, que se encuentra recluida en su cámara. La Reina, mucho más grande que el rey, pone huevos sin cesar. Se calcula que a lo largo de sus 15 años de vida llegará a poner unos 165 millones de huevos.

La reina controla el ciclo hormonal del termitero mediante la emisión de un mensaje químico. Posteriormente, llegada la época, apareceran los individuos alados que abandonarán el nido para crear nuevos termiteros.

– Obreras: son las encargadas de conseguir el alimento y alimentar al resto de individuos, además de cuidar a la pareja real, a las ninfas y construir y reparar los túneles. También son las encargadas de la limpieza interior del termitero. Son ayudadas por las ninfas en sus últimos estadías de desarrollo. La función de alimentar al resto del termitero por parte de las obreras es fundamental, ya que ni las nifas, ni las soldados, ni el rey y la reina podrían hacerlo por sí solas. El grupo de las obreras está compuesto por termitas macho y hembra esteriles de tamaño grande o pequeño, siendo las más pequeñas las que se encargan de las tareas de limpieza y las grandes de las labores de construcción.

– Soldados: Encargadas de la defensa del termitero. Individuos con una cabeza mayor que las de las obreras, más oscura y equipada con grandes mandibulas. Protegen el hormiguero del ataque de otros insectos. Hay algunas de ellas que adquieren formas especieles, estando equipadas con una glandula que segrega una sustancia pegajosa. Cuando el termitero está en peligro, dan la señal de alarma golpeando su cabeza contra el suelo. El grupo de las termitas soldado está compuesto únicamente por hembras estériles.

– Repreductores primarios: Cada cierto tiempo, el termitero produce lo se conoce como termitas aladas. Son adultos maduros sexualmente que salen del termitero para realizar el vuelo nupcial y encontrar otros lugares para la instalación de un nuevo nido. El macho y la hembra se aparean, se desprenden de sus alas. Llegado ese momento, buscan un lugar en el suelo donde poner los huevos. De estos primeros huevos saldrá la primera generación de obreras creando una nueva colonia.

– Reproductores secundarios: Son individuos neotánicos (que retienen una serie de características de los individuos inmaduros) aunque han alcanzado la madurex sexual. Ayudan, si las ciscunstancias lo requieren, a la reproducción. Solo cuando se produce una excisión en el termitero o el termitero se hace tan grande que ya no se encuentran bajo la influencia hormonal de la reina. Entonces desarrollan la capacidad de poner huevos.

La creación de nuevas colonias se realiza por las reproductoras primarias, conocidas como termitas aladas. Son machos y hembras maduras sexualmente que salen del termitero, en lo que se conoce como enjambre o  vuelos nupciales. En su salida son escoltadas por termitas soldado para protegerlas de los ataques de otros insectos. Una vez en el exterior, vuelan una distancia relativamente corta (no son muy buenas voladoras). Entoces la hembra segrega una feromona que esparce batiendo las alas para atraer al macho. Una vez emparejados se produce el apareamiento en un lugar que consideran apropiado donde instalan su cámara nupcial. Es en este momento del proceso cuando pierden las alas.

Los huevos de la hembra, que será la futura reina, se convierten en ninfas. Estas ninfas son alimentadas por la reina. De estas ninfas irán surgiendo las diferentes clases de termitas que hemos visto anteriormente, siendo la primera generación obreras. Encargadas de la construcción del nuevo termitero. 

Los enjambres normalmente se producen en primavera y verano, cuando las condiciones atmosféricas son las adecuadas. Normalmente después de las primeras lluvías.

Todas ellas se alimentan de madera, en concreto, la celulosa, por lo que pueden atacar cualquier derivado de la madera que la contenga. Papel, carton, y todos los derivados de la industria mederera.

Las termitas no pueden digerir la celulosa por sí sola, por lo que necesitan de la acción de unos microorganismos simbiontes en su aparato digestivo que degraden la celulosa, nutriéndose de los productos obtenidos de esa degradación.

Para la obtención de los alimentos, las obreras construyen túneles y galerías hasta donde encuentran el alimento. Dichos túneles los hacen utilizando saliba, excrementos, tierra y trozos de madera.  La colonia se mueve dentro del nido excavando galerías y desplazándose según la estación del año: hacia el interior en invierno, y hacia la parte superior en verano.

Un aspecto a tener en cuenta es que se comen los cuerpos de las compañeras que han fallecido o de aquellas que están gravemente enfermas, para mejorar su aporte de vitaminas.

Una vez se ha producido el vuelo nupcial y el apareamiento, la nueva pareja buscará un lugar adecuado para contruir su cámara nupcial, donde la reina hará la primera puesta de huevos.

De estos huevos saldrá la primera generación de ninfas, y pasado un tiempo se transformarán en las primeras obreras, que de ahí en adelante, se encargarán de realizar todos los trabajos de la colonia. La reina cuenta con reservas alimenticias con las que alimentará a estas primeras ninfas.

La pareja real, ya no abandonará la cámara nupcial en ningún momento de su vida, dedicándose integramente a la reproducción. Se estima que la reina puede vivir unos quince años, periodo durante el cual, llegará a poner unos 165 millones de huevos (en el caso de la termitas subterráneas).

Debido al tamaño de la reina, y su imposibilidad de moverse dado su gitantesco abdomen, las termitas obreras serán las encargadas de atenderla a ella y al rey. Las alimentarán y cuidarán en todo momento, al igual que irán retirando la cantidad ingente de huevos que la reina va poniendo. Estos huevos serán trasladados cámaras anexas donde se irán depositando a la espera de que nazcan las primeras ninfas. Estas ninfas constituiran el 50% del total de la colonia (en el caso de la termita subterránea). El tiempo de incubación es de tres semanas.

El tamaño del rey es mucho menos que el de la reina, aunque aún así es mucho mayor que las obreras.

La cámara nupcial contará en todo momento con la protección de las termitas soldado, que no abandonarán el lugar. Estas termitas soldado serán alimentadas por las obreras.

Las termitas se guían por impulsos químicos. El principal método de comunicación de las termitas se realiza mediante el acto de alimentarse. En el momento que las obreras se pasan el alimento de boca a boca o alimentan a otras, se sabe que la saliba de las termitas contiene una mezla de elementos químicos cuya composición exacta aporta información sobre el estado de la colonia y sus necesidades.

Pasando de unas obreras a otras, de boca en boca, dicha información llegará hasta la reina, la cual recaba toda esa información y después de emite un exudado, que es el equivalente químico de una orden que contiene instrucciones.

Se piensa, que esta transmisión de información mediante interacciones químicas, condicionará la siguiente puesta de huevos de la reina, cuya proporción entre soldados u obreras estará marcada por dichas sustancias químicas y servirá para dar una respuesta adecuada a las necesidades de la colonia.

Hay una serie de características morfológicas que nos sirven para diferenciarlas:

Termitas aladas:

– Antenas rectas

– Alas del mismo tamaño

– Las alas en reposo están planas sobre el abdomen

– La longitud de la termita es la mitad que la de las alas

– Color negro

– La unión entre el torax y abdomen es ancha, sin estrecharse.

– En su parte final el abdomen presenta cercos

Hormigas aladas:

– Antenas curvadas

– Segundo par de alas de diferente tamaño

– Las alas en reposo se presentan de forma inclinada sobre el abdomen

– Su longitud es un poco menor que la de sus alas

– Color negro o  marrón

– La unión entre torax y abdomen presenta un estrechamiento

– El abdomen no tiene cercos en su parte final

Analizaremos las diferencias entre termitas y carcoma desde varios puntos de vista.

Sonido que producen:

-Las termitas cuando deboran la madera no son perceptibles para el oido humano

– La carcoma es fácilmente audible cuando debora la madera.

Aspectos visibles:

– La primera evidencia de la presencia de termitas aparece con la formación de cordones de barro en torno a los elementos de madera o por donde circulan. Mientras que en el caso de la carcoma se hacen muy visibles la cantidad de pequeños agujeros que generan. 

Detectar la presencia de termitas en los primeros momentos de infestación es fundamental. Si por el contrario, se les da tiempo a instalarse y desarrollar el termitero, estamos hablando de que nos enfrentaremos a un problema que requiere meses, incluso años para poder eliminarlo. No podemos olvidar que un termitero medio puede llegar a tener entre 2 y 4 millones de individuos.

Para ello,  se deben revisar todos aquellos elementos de madera. Las termitas, a diferencia de la carcoma, no se detecta facilmente. Consume la madera dejando una fina capa que la separa del exterior, por lo que la mayoría de las veces no la vemos hasta que prácticamente la han dejado hueca.

Normalmente la primera evidencia de la presencia de termitas son los pequeños cordones de barro que aparecen en los filos de los marcos de las puertas o juntas de las paredes. Construcciones creadas por las termitas para mantener las condicones de temperatura y humedad, a traves de las que se desplazan.