CUCARACHAS
Las cucarachas son insectos pertenecientes al orden Blattodea, conocidos por su capacidad para adaptarse a diversos ambientes y su resistencia. Existen aproximadamente 4,600 especies de cucarachas en el mundo, pero solo unas 30 están asociadas con los hábitats humanos. Su cuerpo aplanado y ovalado les permite esconderse en grietas y rendijas, lo que las hace difíciles de eliminar. Estos insectos son omnívoros y pueden consumir una amplia variedad de alimentos, lo que contribuye a su supervivencia en diferentes entornos. Las cucarachas tienen un ciclo de vida que incluye etapas de huevo, ninfa y adulto, y pueden vivir varios meses dependiendo de las condiciones ambientales.
A pesar de su reputación negativa, las cucarachas desempeñan un papel en los ecosistemas al descomponer materia orgánica y reciclar nutrientes. Sin embargo, su presencia en áreas urbanas y domésticas puede ser problemática debido a la posibilidad de contaminar alimentos y propagar enfermedades.
En resumen, las cucarachas son insectos altamente adaptables y resistentes que, aunque desempeñan un papel en la naturaleza, pueden ser una plaga indeseada en los hogares y las ciudades.
TIPOS DE CUCARACHAS
Nos centraremos principalmente en tres de las especies que normalmente pueden constituir una plaga en el interior de nuestras viviendas o negocio: Son la Cucaracha Americana (Periplaneta Americana), la Cucaracha Alemana (Blattella germánica), también conocida como cucaracha pequeña, rubia o chiria, y la Cucaracha Oriental (Blatta Orientalis).
BIOLOGÍA Y HÁBITOS DE LAS CUCARACHAS
Independientemente de la especie de que se trate, las cucarachas comparten una serie de características generales, que es necesario conocer para poder garantizar que los tratamientos sean efectivos. Eliminar las cucarachas en el hogar o negocio se puede convertir una terea complicada si no se cuenta con la ayuda de profesionales en desinsectación.
Ciclo vital de las cucarachas
Se desarrollan por medio de una metamorfosis gradual que comprende 3 estados: huevo, ninfa y adulto. La hembra reúne todos sus huevos en una cápsula con forma de monedero llamada ooteca. Cada especie de cucaracha tiene una ooteca con forma diferente. Todos los huevos contenidos en la ooteca eclosionan al mismo tiempo, lo que hace que entre todas las ninfas abran la parte superior de la ooteca comenzando así su ciclo vital.
Las ninfas son de menor tamaño que los adultos, no poseen alas y su color más claro es diferente del rojizo castaño del adulto. Sin embargo, el comportamiento y las costumbres son similares a las del insecto adulto. Las ninfas pasan por una serie de mudas en las que van oscureciendo el color. El proceso de muda lleva solamente unas horas. Finalmente surge el individuo adulto con su color característico y sexualmente bien diferenciado y con alas. Dependiendo de la especie, éstas pueden ser largas y funcionales o tan pequeñas que puedan parecer inexistentes.
¿Cómo se comportan las cucarachas?
Las cucarachas son animales sociales, sobre todo en sus primeras fases donde demuestran un mayor comportamiento gregario, y segregan un olor característico que las mantiene reunidas. Producen secreciones olorosas que pueden afectar al sabor de los alimentos, llegando incluso a impregnar de un olor característico las zonas más infestadas.
La hembra también segrega un olor especial para atraer al macho, llamado feromonas. Viven acompañando al hombre en lugares donde éste almacena o elabora alimentos: cocinas, despensas, panaderías, etc. Necesitan calor y humedad y suelen salir por la noche en busca de la comida.
Se suele decir que tienen a modo de un reloj en el estómago, porque siempre salen a la misma hora. Se localizan preferentemente detrás de los aparatos eléctricos, neveras, hornos, fregaderos, etc., donde consiguen calor y humedad. En toda cuanta hendidura o fallo de superficie pueda existir e incluso dentro de los interruptores de la luz, se han hallado colonias.
¿Qué comen las cucarachas?
Las cucarachas son omnivoras. Necesitan agua y alimentos. Éstos últimos en gran variedad, prefiriendo en especial los que contienen almidón, grasas, azúcares (carne, quesos, cerveza, harinas, pegamento, cabellos humanos, pelo de los animales), en resumen toda clase de alimentos propios de los humanos o deshechos de los mismos.
Cucarachas: peligros para la salud
Las cucarachas constituyen un peligro para la salud pública, pues adheridos a sus patas transportan, de una parte a otra, microorganismos nocivos que producen diarreas y disenterías (salmonelas, etc). Asimismo en el interior de las cucarachas viven protozoos diversos que pueden producir enfermedades. Las excreciones de las cucarachas contienen alérgenos, lo da lugar a reacciones como el lagrimeo, estornudos, urticaria, etc.
Desde el punto de vista psicológico, llegan a producir cuadros de ansiedad y obsesión, debido al asco y miedo que causan en determinadas personas.
Independientemente de las enfermedades que pueden provocar, no podemos pasar por alto el daño causado a la imagen de nuestro negocio u hogar. Desde mucho tiempo atras, es un animal que se asocia rápidamente con la suciedad, aunque ese no sea el caso. Al estar relacionadas con la transmisión de enfermedades se ven como una vergüenza social.
COMO SON LAS CUCARACHAS
El cuerpo de las cucarachas
Su cuerpo es ovalado y aplanado, caracterizado por una cabeza pequeña que suele estar resguardada por un pronoto en forma de escudo, lo que le proporciona una notable protección. Sus antenas filiformes y sus ojos compuestos, aunque pequeños, juegan un papel crucial en su interacción con el entorno. Las patas, largas, aplanadas y espinosas, junto con las piezas bucales de tipo masticador, reflejan su adaptación a un estilo de vida activo y versátil. Posee dos pares de alas, donde las posteriores, grandes y membranosas, se encuentran cuidadosamente cubiertas por las anteriores, más pequeñas y esclerotizadas, lo que les otorga una protección adicional. Además, destacan un par de cercos laterales en el extremo de su abdomen, elemento distintivo de su anatomía.
El cerebro de las cucarachas
La complejidad de este organismo se extiende a su sistema nervioso, el cual se divide en tres partes principales, reflejando un alto grado de especialización. El protocerebro, la primera de estas divisiones, se conecta directamente con los ojos compuestos y los ocelos, pequeñas estructuras fotorreceptoras esenciales para la percepción visual del insecto. El denominado deutocerebro, o segundo cerebro, establece una conexión vital con las antenas, sirviendo tanto para la detección sensorial como para la motricidad. Finalmente, el tritocerebro, la tercera división, se vincula a un ganglio situado bajo el esófago, que comparte con otros insectos la función de procesamiento gustativo y olfativo. Esta estructura tricerebral no solo subraya la complejidad del sistema nervioso del insecto, sino que también destaca su capacidad para interactuar de manera sofisticada con su entorno.
Como respiran las cucarachas
Las cucarachas, representativas del vasto reino de los insectos, cuentan con un sistema respiratorio único que prescinde de los pulmones convencionales. En su lugar, disponen de una red de tubos denominados tráqueas, que facilitan el intercambio gaseoso directamente con el medio ambiente a través de orificios conocidos como espiráculos. Estos espiráculos, presentes a lo largo del cuerpo del insecto pero ausentes en la cabeza, permiten una difusión efectiva del dióxido de carbono hacia afuera y la captación de aire rico en oxígeno hacia el interior. Mediante un proceso de bifurcación minuciosa, similar a la estructura de un árbol, las tráqueas se extienden hasta alcanzar incluso las células más remotas, facilitando la disolución directa del oxígeno en el citoplasma a través de finísimas traqueolas cuticulares.
A pesar de poseer órganos internos como el corazón, el colon y el esófago, las cucarachas carecen por completo de nariz y pulmones, órganos típicos de la respiración en muchos otros seres vivos. Esta peculiaridad anatómica subraya la eficiencia y singularidad de su sistema traqueal, que les permite incluso sobrevivir sin cabeza durante un período. Este fenómeno se debe a que su respiración no depende de funciones cerebrales, sino de la actividad automática de los espiráculos situados a lo largo de su abdomen, el cual está segmentado en diez partes. Cada segmento alberga espiráculos que se regulan en respuesta a los niveles de dióxido de carbono en el cuerpo, asegurando así un suministro constante de oxígeno a pesar de la ausencia de estructuras respiratorias convencionales.
Capacidad de supervivencia: Alta resistencia de las cucarachas
Las cucarachas son criaturas fascinantes, conocidas por su extraordinaria resistencia y capacidad de adaptación. Algunas especies de estas pueden permanecer activas hasta un mes sin alimento, sobreviviendo con recursos mínimos como cola de sellos. Incluso, tienen la habilidad de vivir sin aire durante 45 minutos y ralentizar significativamente su ritmo cardíaco. Se ha especulado, a menudo en el marco de leyendas urbanas, que estas criaturas podrían ser los únicos supervivientes de un cataclismo nuclear debido a su asombrosa tolerancia a la radiación, que supera entre 6 y 15 veces la de los seres humanos. Sin embargo, esta capacidad se debe más a la infrecuencia de la división celular en su ciclo vital, que a una resistencia intrínseca a la radiación.
Además de su tenacidad ante condiciones extremas, las cucarachas poseen la asombrosa habilidad de sobrevivir sin cabeza, gracias a su sistema nervioso descentralizado y a que su respiración no depende de órganos como la nariz o la boca, sino de espiráculos situados en su cuerpo. Esta capacidad de respirar a través de su abdomen, sumada a un sistema circulatorio menos complejo que el de los humanos, les permite continuar viviendo a pesar de la decapitación, sobreviviendo hasta que la falta de alimentación finalmente las afecta. Este fenómeno, comparado por expertos como Joseph G. Kunkel a la decapitación humana, destaca las diferencias fundamentales entre los sistemas biológicos de los insectos y los humanos.
La capacidad de adaptación de las cucarachas va más allá de la supervivencia física. Se han integrado tan profundamente en los hábitats humanos que especies como la cucaracha alemana han evolucionado para vivir exclusivamente en estos entornos. A pesar de los constantes esfuerzos humanos por erradicarlas, estas criaturas han demostrado una capacidad inigualable para introducirse en los espacios más reducidos y adaptarse a una amplia variedad de condiciones. Aunque se les atribuye la capacidad de sobrevivir a ataques nucleares, es importante matizar que, aunque su esqueleto de quitina y su resistencia a altos niveles de radiación son notables, no son invulnerables a los efectos devastadores de una explosión nuclear de gran magnitud.
En conjunto, la resiliencia, la capacidad de supervivencia sin cabeza y la asombrosa adaptabilidad de las cucarachas destacan la complejidad y la tenacidad de estos insectos, desmintiendo mitos mientras se subraya su fascinante biología.
APRENDE A DIFERENCIAR LA CUCARACHA ALEMANA DE LA AMERICANA
Saber diferenciar la cucaracha alemana de la americana, es importante ya que el tratamiento es ediferente en ambos casos. En esta sección se muestran una serie de aspectos que nos aclararán rápidamente si se trata de una especie u otra.